Big Magic
Mi hermana y yo decidimos comenzar a leer algo juntas. Ella y yo, nos volvimos mucho más cercanas desde un par de años antes de que la pandemia ocurriera. No es que antes no lo fuéramos, pero el nivel de conexión que logramos fue gracias a que comenzamos a trabajar en la misma compañía. Simple y cotidiano. No puedo estar más feliz de haber tenido esos años viviendo y trabajando con ella. La pandemia nos regresó a casa. Tantos meses en cuarentena solo lograron conectarnos más.
Mi hermana tiene la intención de leer más. Yo he notado que cuando quiero tomar un nuevo hábito, me funciona muy bien tener a alguien con quien quedar, alguien a quien rendirle cuentas. Un “accountability buddy” como dicen en inglés. Así que eso queremos en nuestro nuevo viaje juntas por los libros.
Big Magic es un libro de Elizabeth Gilbert, la escritora de “Comer, rezar y amar”. Es un libro que habla sobre el espíritu creativo. Para ella, la creatividad es una especie de magia que posee su propia alma y va vagando de aquí a allá esperando ser escuchada. Todos hemos tenido esas ideas que, si no llevamos a la acción, terminan construyéndose por otra persona. Por alguien que sí decidió dar dedicación, voz y acción a esa idea creativa.
Siento que somos muy duros con nosotros mismos. Personalmente, he pasado por un proceso de aceptación. Aceptar que mi escritura nunca será perfecta, y sin embargo, no se trata de eso. Mi escritura es y solo por eso vale. Si tan solo dejáramos atrás la presiones que nosotros mismos nos imponemos: ¿Qué pensará la gente de esto? ¿Qué tal si no le importa a nadie?, blah, blah, blah. Lo importante aquí es dejar ser. Solo importa confiar en ese camino que te llama. Y lo más importante, comprometerte a esa idea creativa que has decidido adoptar. Es dejar atrás ese miedo.
Si tuviera que recordarme lo que más me marcó de este libro sería: uno, que las ideas están, solo tienes que ser observador y escuchar. Con el ajetreo de la vida ni siquiera les prestamos atención. Dos: esas ideas necesitan de un ser humano para desarrollarlas. Dedícale la acción necesaria. Y tres: confía. Nadie está aquí para hacer las cosas perfectas. Comprométete a tu idea. Moldeala a como necesites. Los errores no son más que variaciones y aprendizajes para llegar a algo. Solo deja que vea luz eso que quieres hacer. Tu idea es importante y no a la vez. Así que no te agobies.
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